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formando el
mosaico
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Ilustración: Edith Hernández Durana
‘La creación perfecta de la humanidad’. Un concepto abstracto,
difuso en su cobertura, permeable ante cualquier sociedad, diverso
en su entendimiento, viene en tamaños para todo nicho de mercado y
se vende como pan caliente.
Tomando como referencia que ‘poder’ analizado desde mi rama de
estudio, debería ser un tema muy sencillo de abordar para los y las
politólogas, no lo es en realidad, ya que el poder como un concepto fi-
losófico, científico y político, ha sido retomado por grandes pensado-
res y pensadoras en el mundo, ejemplos de ello en la rama filosófica
pueden ser la alemana Hannah Arendt, el austro-inglés Karl Popper,
el venezolano Ernesto Mayz-Vallenilla y el francés Michel Foucault; de
la rama política-científica podemos encontrar a Maquiavelo, Weber,
Hobbes, así como muchos otros.
¿Será acaso que el poder es una construcción social de la huma-
nidad? El poder en resumidas cuentas es un concepto abstracto, no
medible, ni cuantificable, es un concepto existente ante la memoria y
el lenguaje humano, algo invisible e intangible, pero observable. “El
poder del que muchos temen, pero a su vez, muchos anhelan poseer”.
La realidad es simple, todo lo que existe dentro del lenguaje social
de la humanidad, es una construcción creada por nosotros y nosotras
mismas, el poder incluso ha sido determinado por grupos que a su
vez, se autonombran con poder facultativo, (burgueses, elites, orga-
nizaciones secretas, etc.) un poder que ha sido creado, modificado,
evolucionado y fusionado con apellidos para su mejor entendimiento
y alcance, ejemplos de ellos son el
poder económico
,
poder social
,
poder popular
,
poder ideológico
, poder con todo lo que se permita
condimentar al gusto, y con esto, no me refiero a una receta casera.
La realidad es que el ser humano ha ido moldeando el lenguaje,
atribuyéndole un nombre a las cosas y acciones que poseemos y rea-
lizamos, al modo que el poder también se use como estrategia de
miedo, lo que Naomi Klein le atribuye a su obra
La Doctrina del Shock
,
que no es más que la competencia por la obtención del poder, que
algunas veces lo miden en recursos naturales, por el uso armamentis-
ta, por el uso tecnológico, o bien, por el uso de la razón, nuevamente
construcciones del hombre y la mujer en un planeta sumamente com-
petitivo, de alto impacto, de guerras, de inseguridad, de violencia,
hambre y pobreza.
Entonces si todos y todas poseemos poder ¿Por qué algunos lo
ejercen y otros no?
Una vez que comprendemos que todas las instituciones, personas,
colectivos y organizaciones licitas e ilícitas tienen poder, ahora nos
cuestionamos por qué algunos si hacen uso de su poder y otros no,
así que me di a la tarea de consultar autores acerca de la definición
misma y de sus modos y usos para ejercerlo, algunos le atribuyen el
poder al sujeto A, quien ejercerá su poder sobre el sujeto B para la
toma de decisiones, para ello me pregunté muchas veces, si eso no
sería acaso erogar todo derecho humano sobre el sujeto B en lo más
defendible por nuestra Constitución,
la libre expresión o bien
, libertad
que como sistema democrático, libre y soberano debemos respetar.
¿Qué es el poder? Como politóloga tendría la severa inclinación
de citarles a muchos especialistas de la ciencia del poder, PERO NO
LO HARÉ. El poder es una construcción que ha modificado las reglas
del juego y las ha moldeado a su beneficio. En la actualidad, un Es-
tado puede autonombrarse
primer mundo
, así como autonombrarse
el más poderoso del mundo, pero eso es solo ciencia ficción, deben
entender los y las lectoras que el poder es un concepto que todos
poseemos, es ejercido por algunos debido a su insana competencia
derivada de otras creaciones humanas como la economía, la política
misma (creada para el control de una sociedad y la toma de decisio-
nes que beneficien a todos (a) sin distinción), pero sabemos que no es
así, es la
praxis
muchas veces el condenado vicio opuesto de la teo-
ría, y por ende, el poder también tiene sus vicios al calificar de pode-
rosas a las agrupaciones oligarcas bajo el entendimiento materialista,
o bien a los poderosos intelectuales por haber tenido el beneficio de
la duda y aplicarla en diversas publicaciones, entre muchos ejemplos
más que pudieran citarse.
El poder es manejado por los de arriba y los arriba se ubican en esa
posición porque nosotros así lo hemos dispuesto dentro del enten-
dimiento de posesión de poder (intelectual, ideológico, económico,
político, social, popular. etc.)
Por Leyla de la Fuente Zárate, alumna de la Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública
CONSTRUCCIÓN SOCIAL