Rúbricas XVIII El quehacer bibliotecario para la formación... 76 77 Rúbricas XVIII La biblioteca de Universidades Jesuítas. Desafíos ante el cambio de época - Introducción La Universidad Iberoamericana Torreón está cumpliendo 40 años como proyecto educativo jesuita en el noreste del país. Desde el inicio de sus actividades, en agosto de 1982, la institución ha impulsado un modelo educativo humanista que tiene como misión “la formación integral de personas, profesionalmente competentes y comprometidas con la transformación de la sociedad, a través del Modelo Educativo Ignaciano”. Para cumplir con este propósito, quienes encarnamos el modelo educativo, sumamos nuestros esfuerzos para que las y los estudiantes de la institución tengan una educación de calidad, se vinculen con las problemáticas sociales del entorno y generen conocimientos para la construcción de un mundo más justo. Desde la biblioteca Luis González Luna y Morfín asumimos esta labor y trabajamos para contribuir en los procesos formativos de nuestra comunidad, adaptándonos a los cambios sociales y tecnológicos que impactan en los procesos de enseñanza-aprendizaje. Sin lugar a duda, el confinamiento derivado de la pandemia por covid-19 transformó radicalmente estos procesos y trajo consigo una serie de cambios en el desarrollo de nuestra labor, que no sólo impactaron en la forma de brindar los servicios y recursos de información, sino también en la forma en que nos relacionamos con la comunidad universitaria. La suspensión de actividades presenciales y el cierre total de la biblioteca nos permitió revalorar la presencia, las interacciones y el contacto humano; evaluar el aporte de nuestros servicios hacia la comunidad universitaria, y reflexionar sobre nuestro papel dentro y fuera de la institución. A continuación, presentamos un primer acercamiento a este ejercicio de discernimiento sobre nuestro “Ser” y “Hacer” bibliotecario, en donde destacamos la labor colectiva y solidaria para que este espacio sea coadyuvante en la generación de conocimientos académicos y humanos que abonen a la misión educativa. - La contribución académica de la biblioteca: una suma de esfuerzos Con relación a la contribución académica de la biblioteca, nuestro centro cumple con las funciones básicas de proveer espacios de trabajo y recursos de información académica para el aprendizaje y la investigación. El espacio de trabajo ofrece áreas comunes, cubículos de estudio, sillones de lectura, equipos de cómputo e Internet inalámbrico. En términos de información, se cuenta con un acervo de más de 26 mil ejemplares físicos, que buscan satisfacer las necesidades de los planes de estudio, respaldar los procesos de acreditación de las carreras y atender las necesidades de los usuarios que hacen investigación o disfrutan de la lectura en formato físico (es importante destacar que, pese a la mayor disponibilidad de recursos digitales, el servicio de préstamo bibliográfico se ha incrementado en los últimos años). Foto: Publicidad Ibero Torreón Rúbricas XVIII El quehacer bibliotecario para la formación... Rúbricas XVIII La biblioteca de Universidades Jesuítas. Desafíos ante el cambio de época
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