Versión de HTML Básico
mosaico
central
[ 6 ]
Lo que nunca te
dijeron sobre
el talento
Por Lic. Miguel Nieva Guevara, egresado de la licenciatura
en Mercadotecnia
Ilustración: Cristina Bermúdez Flores, alumna de la licenciatura en Diseño de Interacción y Animación Digital
N
uestra sociedad está conformada, aparentemente,
por personas talentosas y comunes.
Las personas comunes consideran que las ta-
lentosas nacieron con bendiciones específicas.
Liderazgo heredado, oportunidades más grandes, mucho di-
nero, etc.
En la experiencia que llevo conociendo empresas y gente
excepcional al mando, descubrí que no es así.
Hoy hablaremos sobre el talento y su concepto verdadero.
Existe una creencia falsa de que éste se hereda.
Y constantemente nos saboteamos con pensamientos
poco motivadores:
“es lo que nos tocó”,
“agradece que tienes trabajo”,
“escoge la carrera que te deje más dinero”,
“eso es sólo para la gente que viaja...”
En este artículo, desafiaré y atacaré ese argumento.
Mi principal opinión es, que en la época actual, lo mejor
que podemos hacer es perseguir nuestras pasiones sin im-
portar la situación en la que nos encontremos.
Sí, perseguirlas hasta el cansancio.
Después, hay que ejecutar una fórmula impecable para
destacar:
trabajo duro, enfocado y constante.
Hablar de este tema es complicado, porque es cuestionar
un status quo. Sin embargo, reflexionarlo y proponer cami-
nos es importante para ser mejores profesionales.
El talento es una joya escasa pero notable.
Conocer personas con talento pulido es de lo más inspi-
rador que hay y escuchar sus experiencias son magistrales.
El mundo se encuentra en una grave crisis de liderazgo y
personas carentes de querer crecer y retarse diariamente.
Cada día preferimos consumir a crear.
Ser espectadores y quejarnos de la vida, contrariamente
a
retar nuestras áreas de comodidad y pulir los verdaderos
talentos que tenemos.
En las escuelas se nos ha enseñado a
seguir reglas
, tener
un manual de cómo actuar y comportar.
En nuestra familia a mantenernos siempre seguros y no
pasar la raya de arriesgarse (esto no quiere decir que no nos
importen, al contrario, ámalos con alma y corazón, pero que
no sean tu guía de decisiones).
El gobierno te pide que, si vas a emprender y pedir apoyo,
te acoples
a los miles de requisitos burocráticos que existen
para operar.
Y en las empresas, que el jefe manda y se acabó.
Con todo esto, parece que es mejor quedarse callado, en
un empleo “decente” y disfrutar los fines de semana hasta el
último día de la vida.
Pero, ¿para eso fuimos creados? ¿Para eso nos levan-
tamos diariamente?
El mundo y nuestra sociedad tienen problemas inimagina-
bles. Para que podamos resolverlos, es necesario
gente con
actitud de propuesta.
Si te dijera que pudieras acceder a ambientes de ensueño,
donde
TODOS
buscan el bienestar de su equipo, aceptan las
críticas, crean comunidad y se enfrentan a todos los factores an-
teriores para que cada uno pueda disfrutar de sus pasiones al
máximo, ¿entrarías?
Estos ambientes existen.
Para alcanzar esos ambientes, que se encuentran en diversas
partes del mundo, se necesita tener
un talento desarrollado.
El talento se basa en probar y encontrar diferentes afi-
nidades, sentir un gusto por la actividad
, para finalmente,
enfocarla con trabajo duro y perseverancia durante mu-
cho tiempo.
Básicamente, el objetivo principal se convierte en destacar.
Que entres a empleos donde
te sientas pleno
todos los
días o emprendas con la satisfacción de estar
influyendo en
miles de personas.
¿Por qué no todos somos talentosos?