Página 14 - octubre2014

Versión de HTML Básico

reflejo
mosaico
[ 14 ]
Por LDG Arturo Cielo Rodríguez,
Jefe de Diseño de la DCI
E
l
sueño
de
H
éctor
F
ernández
de
L
ara
elementos arquitectónicos clásicos y traerlos a la modernidad
con las comodidades actuales, así pasamos de un proyecto ar-
quitectónico y de interiorismo a operar un hotel. Tomé cargo de
las funciones de mercadotecnia, relaciones públicas y comuni-
cación interna.
Siempre he sido un viajero nato. Al principio me parecía pre-
tencioso pensar que la manera en cómo a mí me gusta viajar
también le gusta viajar a otros, pero ese pensamiento ha sido
una de las claves del éxito de
El Sueño
, poder potencializar mi
experiencia como viajero, utilizar la empatía como herramien-
ta. Soy un viajero muy observador sobre qué hay o qué no hay,
cómo era el tipo de servicio y me enfoque en un tipo de segmen-
to muy claro: que eran los hoteles boutique. A mí me gustaba
ir a este tipo de establecimientos y cuando lo empecé a hacer
no estaba tan desarrollado en el mercado. Me parece que es
un turismo totalmente experiencial. La experiencia te marca y
creo que el negocio de la hospitalidad es eso, sobre todo para
este segmento donde el viajero acude a lugares que no son muy
grandes, donde verdaderamente el servicio al cliente es impor-
tante. Generalmente son lugares lindos que están albergados en
casonas históricas o tienen una arquitectura particular pero lo
que hace verdaderamente completa esta escenografía que po-
dría ser fabulosa es el trato personalizado, que te llamen por
tu nombre, que sepan qué te gusta o qué no te gusta comer,
que sean cómplices tuyos si vas a dar un tipo de sorpresa o si
estás celebrando algo especial, entonces esta combinación de
elementos es lo que completa la experiencia. Un hotel bonito y
un staff eficiente ya no son suficiente, tiene que ser la combina-
ción de elementos y no es tarea sencilla. Dato curioso es que en
este tipo de hotelería la gente elige el hotel y después el lugar,
entonces es una responsabilidad muy grande. Traté de emular
la formula en Puebla. Algo importante son las instalaciones que
tienen que ser de primera, con una constante revisión; el cliente
y más ahora que la gente viaja frecuentemente, se da cuenta
cuando falla el mantenimiento de un local.
E
studié la Licenciatura en Comunicación en la Universidad
de las Américas-Puebla y mi primer trabajo fue para Co-
municación y Relaciones Públicas en VW de México, editá-
bamos un periódico y publicaciones destinadas al público
interno: empleados, red de concesionarios, consorcio, etc. Sentía
que me hacía falta formarme en la parte gráfica de comunicación.
En ese tiempo descubro que había un posgrado en la Ibero que
estaba que ni mandado a hacer para lo que estaba desarrollando
profesionalmente y era la Maestría en Comunicación y Diseño Grá-
fico. Algo que llamó mucho mi atención fue el enfoque humanista
que de entrada me parecía bien pero cuando lo viví me encantó. La
Ibero es una universidad muy congruente con eso: lo que se pre-
dica, se vive. Dispongo de poco tiempo libre, sin embargo, el ser
docente es algo que he pedido que no se acabe nunca. Caminar
por los pasillos y encontrarte con tolerancia, respeto, diversidad,
gente con capacidades diferentes es algo que me gusta. Me gusta
porque existe ese respeto al ser humano como tal. Por un lado,
académicamente me sigo preparando y por otro esa parte huma-
nista, la cual yo no sabía que para mí era importante, la vivo a
plenitud aquí. Es una pena que en el campo laboral se viva poco
o es nula. Me gusta ser útil a la comunidad a través de mis cono-
cimientos. Aproximadamente son ocho años dando clases en la
Universidad Iberoamericana Puebla, de formación comunicólo-
go pero como catedrático, me desempeño en la Licenciatura en
Diseño Textil. Las asignaturas y temas que me interesan tienen
que ver con la historia del vestido, mercadotecnia del mundo
de la moda, lenguaje textil y semiótica del vestido. La semiótica
tiene un aterrizaje muy profundo en este campo; lo que trato de
transmitir a mis alumnos es aquello que Roland Barthes, sin ser
una persona dedicada al cien por ciento a ese mundo, describe
en
El sistema de la moda
como ese perfecto
clic
para explicar
todo un sistema de significaciones a través de la vestimenta.
Existe la idea que estudiar diseño de modas o diseño textil es
algo frívolo y superficial, la mayoría de los alumnos están en ese
rollo, cuando descubren este sustento teórico y se dan cuenta
que es más complejo de lo que creían y que pueden establecer
paralelismos a nivel de cualquier disciplina filosófica.
Además de catedrático he sido director de arte de algunas pro-
ducciones. Mi actividad principal la divido en dos, una es la parte
académica en la que tiene que ver la comunicación, la mercado-
tecnia y la moda. Mi formación en “moda” ha sido autodidacta y
por ahí me ha llevado la vida, me han invitado a dar seminarios
(o a tomarlos) básicamente sobre tendencias e historia. La otra
actividad en la que me desarrollo es la hotelería. Es curioso porque
no tengo formación de hotelero y sin embargo tengo una empresa
dedicada al mundo de la hospitalidad llamada
El Sueño
, justamen-
te el pasado 5 de octubre cumplió 12 años de abrir sus puertas y
empezó como un ejercicio que se volvió un proyecto interesante.
Yo hacía sets, dirección de arte a nivel escenográfico y eso me
acercó muchísimo al interiorismo.
El Sueño
es el primer proyecto
que hago formalmente como una cuestión de diseño de interiores.
Tengo mucho gusto por las casonas antiguas, mi socio quién es
arquitecto, desarrollo la rehabilitación y yo los interiores (conside-
ré el proyecto montándolo como una escenografía). La ciudad de
Puebla tiene uno de los centros históricos más grandes de toda
América, hay muchas casas que están abandonadas y era el
caso del edificio que aloja a
El Sueño
. A mí me interesaba tomar
Ramón Tecólt González