Página 14 - septiembre2014

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formando el
mosaico
[ 14 ]
¿Sigan al líder?
C
uando el Extraño pregunte: Qué significa esta ciudad?
Coméis todos juntos por amor uno del otro?
Qué le responderás?
Tú que has vejado a las viudas
felado a los niños / descuartizado en cada suburbio
los huesos de tus ancianos / la carne sin carne del pobre
qué le responderás tú que has ordenado que arda el habla del inválido
su cuerpo plegado sobre cloacas infames / que sabes //
que viste morir a un niño caído en un pozo
que nunca rescataste / a su madre prostituida gemida ahorcada
contra la tierra masturbándote emancipándote sobre su sangre
Cuando la trompeta final resuene / los martillos de la muerte golpeteen
y sea el juicio fiero en el desierto de los pueblos, qué le dirás al Extraño?
Nadie sabe / nadie nos ha enseñado a amar?
Todos nos desvientramos por descolgar techos de parias destazados?
Somos un gremio eficaz que trafica hasta con los ojos de Edipo arrancados?
No supimos nunca de Abu Ghraib / de Guantánamo /de las pirámides humanas
del cáñamo por el que revientan cráneos / alumbran llanos / portentos baluartes
de la civilización de Sybilia queriendo morir /
del norte exhumando los carros bomba en Damasco
los secuestros en Apatzingán / los ejércitos cuerpos quemados en llanos portentos baluar-
tes de toda la tierra?
Qué firme inacción del corazón rebelde
del que no ha comido el frío de los pobres
el cobre del pueblo
y el polvo sin nombre
de la inanición.
C
omenzaré por asaltarlo, querido lector, con una pregun-
ta: ¿en quién piensa cuando escucha la palabra “líder”?
¿En Martin Luther King? ¿En Hitler? ¿Gandhi? ¿Acaso
Peña Nieto?
¿Alguna vez ha pensado, querido lector, en sí mismo?
Para mantenernos alejados del discurso de autoayuda, tomemos
en cuenta lo siguiente: no todos pueden ser líderes. No me malinter-
prete y siga leyendo. Empecemos por definir la palabra líder, que tiene
dentro
“la partícula “lid”, que proviene del latín lis-litis
que significa:
disputa, querella o proceso. Así, un líder es quien inicia o se encuen-
tra inmerso en una querella, disputa o proceso” (Landolfi, 2008) y si
bien podríamos afirmar que el mundo está lleno de disputas querellas
y procesos, no por eso está lleno de líderes, porque, en primer lugar
y al contrario de lo que se cree, el liderazgo no tiene que ver con
un puesto, o el simple hecho de tener gente a cargo, sino que es
una mezcla de factores que dan como resultado la valentía necesa-
ria para entrar en conflicto con uno mismo e incluso con los demás
para tomar decisiones acertadas que guíen a otras personas hacia
determinado objetivo. Y eso, querido lector, no todos pueden hacerlo.
Por Dessiré Abundis Olvera, alumna de la licenciatura en Ciencias Ambientales y Desarrollo Sustentable
Por Pablo Piceno Hernández, alumno de la licenciatura en Literatura y Filosofía
Articulus septimus
Y, en segundo lugar, también se trata de voluntad, es decir, puede
que una persona cuente con todas las cualidades para ser un líder
pero decida no serlo, y es completamente válido. (Kiehnle, 2012)
De acuerdo con Emilia Kiehnle, el liderazgo es más bien una
relación entre la persona que dirige y el que es dirigido, que fluye
en los dos sentidos, esta última, una característica que le quita ob-
jetividad al liderazgo, porque cada relación es diferente una de otra
como cada líder es diferente uno de otro. Esto conlleva ciertas di-
ficultades que personas como Gandhi, Martin Luther King o Hitler,
supieron sortear desde su particular forma de ver el mundo y que
los llevaron a conseguir la invasión de Polonia o la independencia
pacífica de la India.
Así, entre ser el que sabe lo que hace, el que es lo suficien-
temente valiente e incluso el que tiene más carisma, un líder se
compone de experiencias y decisiones que lo llevan a un punto
estratégico por delante pero no por encima de la gente.
Haya pensado en usted o no, querido lector, creo que el mundo,
más que necesitar un líder a quién seguir, necesita ideas revolu-
cionarias y gente que no tenga miedo de seguirlas.
Para Oscar Soto B., que enseña más de lo que dice
Oh my soul, be prepared for the coming of the Stranger.
Be prepared for him who knows how to ask questions.
T.S. Eliot, Choruses from the Rock
Ilustración: Fernando Michel Calderón Miranda