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proyecto de doctorado era un tanto interdisciplinario y por un tiempo cuando me topaba
con un problema, molestaba la facultad en mi departamento quienes eran expertos en
varias disciplinas que necesitaba. Recuerdo el día en que Henry Taube (quien ganó el Premio
Nobel dos años después) me dijo que no sabía cómo resolver el problema que estaba
teniendo en su área. Yo era un estudiante de posgrado en su tercer año y me había dado
cuenta de que Taube sabía cerca de mil veces más de lo que yo sabía. (Estimado
aproximado) Si él no sabía la respuesta, nadie la sabría.
Allí fue donde me llegó, nadie la tenía. Es por eso que era un problema de investigación. Y
al ser mi problema de investigación, dependía de mí resolverlo. Una vez que enfrenté ese
hecho, resolví el problema en un par de días. (En realidad no era muy difícil; solamente tenía
que intentar unas pocas cosas). La lección crucial era que la extensión de las cosas que no
sabía no era simplemente vasto, era, para todos los propósitos prácticos, infinito.
Esa comprensión, en lugar de ser desalentadora, era liberadora. Si nuestra ignorancia es
infinita, el único curso de acción posible es salir de ese embrollo lo mejor que podamos.
Consideraría que nuestros programas de doctorado a menudo perjudican a los estudiantes
de dos maneras. En primer lugar, no creo que los estudiantes estén hechos para entender
lo difícil que es hacer una investigación. Ni que tan complejo es hacer una investigación
importante. Es incluso mucho más difícil que tomar los cursos más exigentes. Lo que lo hace
difícil es que la investigación es una inmersión en lo desconocido.
Simplemente no sabemos lo que estamos haciendo. No podemos estar seguros de si
estamos haciendo la pregunta correcta o hacer el experimento correcto hasta no obtener
la respuesta o el resultado. Es cierto que la ciencia se hace más difícil por la competencia
de las subvenciones y espacio en las mejores revistas. Pero aparte de todo eso, haciendo la
investigación significativa es intrínsecamente difícil y cambiando los departamentos, o las
políticas nacionales o instituciones no ayudará a una disminución de su dificultad.
En segundo lugar, no hacemos un buen trabajo de enseñando a nuestros estudiantes cómo
ser productivamente estúpidos - es decir, si no nos sentimos estúpido significa que no
estamos realmente tratando. Yo no estoy hablando relativamente de la estupidez como tal
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